jueves, 11 de diciembre de 2008

Ecos de pasión...


A fuego lento no hiervo... Me descubro ante ti frágil y trémula. Acaricias mi espalda con un dedo y dibujas alientos en mi cuello. Juego con tus labios y muerdo tu lengua. Temblamos... Deseo acariciar cada rincón de tu cuerpo, quiero hacerte sentir mio, y ser tuya... juguemos a la pasión...Entrego de mí cada poro, cada respiración, cada latido... ¿Lo sientes? Bésame con ahínco, saborea mi cuerpo, devora mis entrañas. Ardamos en el fuego del contacto con nuestra piel. Piel que yace húmeda, piel sedienta de tus caricias.

Miro tus ojos llenos de deseo, y me dejo llevar por el calor... Desnudo mi cuerpo y mi alma, y me tumbo a tu lado esperando que la noche no termine...Rodeo con mis brazos tu silueta, recorro cada centímetro de ti con mi tacto, mis dedos se desplazan solos... Noto tus silencios y noto tus jadeos. Nos confundimos con el aullar de los lobos...La luna ya está en lo más alto de la noche, y nuestros cuerpos se funden como uno... Amantes de la noche del día amargo, amantes en las sombras... Dos cuerpos y un solo latir... Encondidos solo los dos, dejando que nuestras fantasías se hagan realidad. Compartiendo leña ardiente y ecos de pasión...Engañando a los amaneceres. Siendo uno en vez de dos. Almas unidas, cuerpos enlazados... Sigue amándome cada noche como hoy...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Fundidos por el amor que nos invade, despertar cada mañana y ver tu bello rostro junto a mi es lo que llena de ilusión esta vida. Una vida distinta desde que la comparto contigo.